- "Alfredo, quieres este billete?"
- "Claro Marisa... son 100 dólares, ¿quién no los querría?"
- "Marisa, no sé qué pretendes con esto, pero siguen siendo 100 dólares, claro que los tomaré si me lo entregas."
- "Lo sigues queriendo?"- "Mira Marisa, sigo sin entender que pretendes, pero ese es un billete de 100 dólares y mientras no lo rompas conserva su valor..."
- "Entonces Alfredo, debes saber que aunque a veces algo no salga como quieres, aunque la vida te arrugue o pisotee, SIGUES siendo tan valioso, como siempre lo hayas sido ... Lo que debes preguntarte es CUANTO VALES en realidad y no lo golpeado que puedas estar, en un momento determinado".
- "Toma, guárdalo para que te recuerdes de esto cuando te sientas mal ... ¡pero me debes un billete nuevo de 100 dólares para poder usar con el próximo amigo que lo necesite!"
Alfredo volvió a mirar el billete, sonrió, lo guardó en su billetera y dotado de una renovada energía, llamó al mesero, para pagar la cuenta.
En los negocios, los que renuncian, son más numerosos, que los que fracasan, es por ello que, muchas veces nuestro afán de conseguir las cosas rápidamente y ahora, nublan la realidad de que para recoger, primero hay que plantar, y esté proceso lleva su ...tiempo y no muchos, son capaces de esperar, ya que su impaciencia les supera y abandonan, por ello hay que perseverar, luchar y saber que el Tiempo te da la Razón.