Publicado el 8 de marzo de 2013
Se podría decir que cuando un senador habla durante horas en una
sesión, estamos frente a un intento de obstrucción. El problema esta
semana en el Senado de Estados Unidos es que fueron muy pocos los
senadores que hablaron sobre el programa de asesinatos con aviones no
tripulados.
La confirmación del polémico nombramiento realizado por el Presidente
Barack Obama de John Brennan como director de la Agencia Central de
Inteligencia (CIA) fue postergada el miércoles
por la tarde debido a la obstrucción del Senado. El motivo: el papel
desempeñado por Brennan en los asesinatos programados con aviones no
tripulados y el supuesto poder del Presidente Obama de matar a
ciudadanos estadounidenses sin que medie el debido proceso, si plantean
una “amenaza inminente”. El senador republicano por el estado de
Kentucky y miembro del ‘Tea Party’ Rand Paul lideró la obstrucción del
nombramiento de Brennan en el Senado, a la que se sumaron varios de sus
colegas republicanos. Desde las filas demócratas, al momento de escribir
esta columna, tan solo el senador Ron Wyden, de Oregon, se ha sumado a
esta anticuada y legítima técnica del obstruccionismo, que consiste en
postergar las actividades del Senado mediante el discurso de un senador.
Los miembros del Congreso, que están a cargo de supervisar los
asuntos militares y de inteligencia, le solicitaron a la Casa Blanca, en
reiteradas oportunidades, los documentos que detallan el fundamento
legal del programa de aviones no tripulados, y en todas las
oportunidades los documentos les fueron negados. El nombramiento de
Brennan inició el debate y obligó al gobierno de Obama a realizar
algunas concesiones formales. Las respuestas brindadas hasta el momento
no satisfacen al senador Paul.
Cuando ya llevaba casi seis horas de discurso, el senador Paul
reconoció: “Realmente no tengo la capacidad de impedir este
nombramiento, ya estoy comenzando a cansarme y no sé por cuánto tiempo
más podré seguir haciendo esto. De modo que, en definitiva, no podré
impedir el nombramiento, pero puedo intentar llamar la atención sobre
este tema y tratar de obtener una respuesta… Sería importante obtener
una respuesta del presidente y creo que todos nos sentiríamos más
tranquilos si él dijera explícitamente que en Estados Unidos no se
asesinará a no combatientes con aviones no tripulados. El motivo por el
que es necesaria una respuesta es porque nuestro programa de ataques con
aviones no tripulados en el extranjero mata a personas que no son
combatientes. Podrán alegar que están conspirando o que algún día podrán
convertirse en combatientes, pero si vamos a aplicar el mismo criterio
en Estados Unidos se trata de un país completamente diferente del que
conozco”.
El problema de las ejecuciones extrajudiciales de ciudadanos
estadounidenses, ya sea en Estados Unidos o en el extranjero, es, sin
duda, un asunto muy importante. Pero también es importante el problema
del asesinato, cada vez más frecuente, por parte del gobierno
estadounidense de civiles en todo el mundo, ya sea mediante ataques con
aviones no tripulados, redadas nocturnas realizadas por las fuerzas de
operación especiales o a través de otros medios letales.
El discurso obstruccionista de Rand Paul siguió un camino bastante
llamativo, que incluye referencias a “Alicia en el país de las
maravillas” y citas al destacado abogado constitucionalista progresista y
columnista de The Guardian Glenn Greenwald y al escritor Kevin
Gosztala, autor del blog Firedoglake.
El Fiscal General de Estados Unidos, Eric Holder, envió una carta al
senador Paul el 4 de marzo que decía lo siguiente: “Supongo que es
posible imaginarse circunstancias extraordinarias en las cuales sería
necesario y adecuado, en virtud de la Constitución y de las leyes en
vigor de Estados Unidos, que el Presidente autorice a las fuerzas
armadas a aplicar fuerza letal en territorio estadounidense”.
Holder aclaró que la pregunta de Paul era “totalmente hipotética”. De
modo que Paul presentó en el Senado el caso real de dos ciudadanos
estadounidenses que fueron asesinados en ataques con aviones no
tripulados: Anwar al-Awlaki y su hijo, Adbulrahman. Anwar al-Awlaki
murió en un ataque con avión no tripulado de Estados Unidos en Yemen el
30 de septiembre de 2011. Dos semanas más tarde, también en Yemen, su
hijo de 16 años, Adbulrahman, nacido en Denver, murió en un ataque con
avión no tripulado.
El senador Paul declaró: “Uno de los casos más conocidos de
ciudadanos estadounidenses asesinados en el extranjero es el de
al-Awlaki. Lo asesinaron con el argumento de que era simpatizante [del
enemigo]. Creo que no hay duda de que era un simpatizante. Era un mal
tipo que simpatizaba con el enemigo. Sin embargo, su hijo de 16 años fue
asesinado dos semanas después en otro ataque con avión no tripulado y
no tengo conocimiento de que estuviera en alguna lista de enemigos. Se
niegan a brindar esta información. Creo que la respuesta del portavoz
del presidente es reprobable. Realmente debería ser llamado a declarar.
Es decir, creo que este tipo de respuesta poco seria demuestra la falta
de consideración por los derechos individuales o de los estadounidenses.
Como recordarán, el portavoz del presidente declaró: ‘Bueno, el chico
debería haber elegido a un padre más responsable’. ¿Es ese el criterio
que quisieran que su gobierno aplicara en Estados Unidos? Hay muchos
delincuentes en nuestro país, hay mucha gente mala, pero si Ud. fuera el
hijo de una mala persona, ¿sería ese motivo suficiente para que lo
mataran?”
Mientras Paul obstruía el nombramiento de Brennan en el Senado, Will
Fitzgibbon escribía desde la Oficina de Periodismo de Investigación en
Londres: “El mes pasado lanzamos un nuevo proyecto relacionado con los
aviones no tripulados denominado: ‘Ponerle nombre a los muertos’. La
finalidad de este proyecto es identificar la mayor cantidad posible de
las 2.500 víctimas de ataques estadounidenses con aviones no tripulados
en Pakistán. Debido a que actualmente desconocemos la identidad de un
80% de los que fueron asesinados, creemos que es un paso crucial y
necesario para librar un debate más transparente sobre los aviones no
tripulados. …A raíz de la atención que recientemente se ha prestado a
los ciudadanos estadounidenses que han muerto en ataques con aviones no
tripulados, y como consecuencia del creciente debate sobre los aviones
no tripulados, consideramos que sería un buen momento para recordar las
historias personales de todas las víctimas de los ataques con aviones no
tripulados, de las que conocemos y de las que no”.
Barack Obama y John Brennan supervisan los ataques con aviones no
tripulados que están matando a miles de civiles y que no nos dan más
seguridad, sino que, por el contrario, engendran el odio hacia Estados
Unidos por parte de poblaciones enteras, como las de Yemen y Pakistán.
La indignación del senador Paul ante el presunto derecho del presidente
de matar a ciudadanos estadounidenses es completamente legítima, aunque
también es vergonzoso y peligroso que el asesinato de miles de personas
en todo el mundo no provoque la misma indignación.
Denis Moynihan colaboró en la producción periodística de esta columna.
© 2012 Amy Goodman
Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero
internacional que se emite diariamente en más de 750 emisoras de radio y
televisión en inglés y en más de 400 en español. Es co-autora del
libro "Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos
extraordinarios en Estados Unidos", editado por Le Monde Diplomatique
Cono Sur.